Despliegue, ganas, actitud, aire fresco y criterio. El centrocampista del Cartagena Jony Álamo es en este 2024 un comodín muy importante para Julián Calero. El futbolista unionense de 22 años contribuye en este nuevo año al equipo albinegro con minutos de calidad, siendo así un relevo importante en las segundas partes y fundamental para el descanso de compañeros como Damián Musto y Tomás Alarcón.
La plantilla albinegra puede acusar el desgaste físico en esta segunda parte de la temporada, por la acumulación de minutos, la alta edad de la mayoría de titulares y últimamente la apuesta de Calero por un once más consolidado en estas tres primeras jornadas. En ese escenario aparece Jony Álamo para darle al Cartagena esos minutos de calidad, recorrido y profundidad en la recta final de los partidos.
El unionense jugó casi una hora en el partido de Copa del Rey contra el Valencia, dio la asistencia a Kiko Olivas en Santander en solo un cuarto de hora y ayudó en la retención del balón y amplitud del campo en la importante victoria al Amorebieta. Jony Álamo sabe interpretar cuál es su rol en el Efesé y es de gran ayuda para Calero.
El medio, ex del Elche y de la Cultural Leonesa, debutó siendo solo un adolescente en el fútbol profesional y todo le vino muy de golpe. Superadas importantes lesiones en el pasado, actualmente valora mucho los minutos que tiene esta temporada en su casa, Cartagena.
Jony Álamo fichó por el Efesé el pasado verano, inicialmente para ser una pieza importante en el filial de Segunda RFEF pero con el firme objetivo de ganarse oportunidades en el primer equipo. Así ha sido, habitual con los mayores desde la pretemporada, fijo para el exentrenador Víctor Sánchez del Amo y algo más intermitente desde la llegada de Calero. Su contrato caduca el 30 de junio y es ampliable en función de objetivos, como alcanzar alrededor de una veintena de titularidades. Actualmente lleva cuatro y es una opción muy complicada.
laverdad.es
